Luis Bermejo en Firmado por… Yo, Robot, el volumen que me faltaba de la colección. Aunque en realidad son tres, me interesan los dedicados a Isaac Asimov, así que ya tengo los dos que ilustran los relatos del genio de la ciencia ficción. En esta ocasión, Luis Bermejo adapta varias historias de robots.
‘Firmado por… Yo, Robot’. ¡Repetimos con Asimov!
Y después de la brillante adaptación de relatos que comenté hace algunas semanas, me han regalado el primer tomo de la colección Firmado por…, que inauguraba también Isaac Asimov con una historia larga, completa: Yo, Robot. No se trata de la adaptación del cuento de mismo nombre, sino de una sucesión de historias de robots, que figuran en las colecciones de Cuentos Completos de Isaac Asimov publicadas en España (2 tomos, para ser exactos, si vamos a la edición de bolsillo de Ediciones B).
Nada tan lógico como las Tres leyes de la robótica
Precisamente, las Tres leyes de la robótica son uno de los dos hilos conductores de la historia presentada por Luis Bermejo. Todo arranca cuando un periodista va a entrevistar a Susan Calvin, la robopsicóloga primera de la U.S. Robot and Mechanichal Men, Inc, empresa multinacional que estudia, fabrica y comercializa robots en el mundo. La doctora Calvin ya es una mujer madura y tiene muchas historias que contar.
A raíz de este encuentro, escuchamos varios relatos en boca de la doctora Calvin a lo largo de décadas anteriores. Veremos cómo unos robots se montan juergas en un planeta lejano en lugar de trabajar; cómo un robot perdido corretea como loco por las minas de un yacimiento de otro planeta; cómo un candidato a alcalde es acusado de ser un robot para desprestigiar su imagen, justo antes de las elecciones… En todas estas historias, las leyes de la robótica son esenciales.
Jugar con las tres leyes… ¿o eran cuatro?
Se presentan, pues, varios misterios que avanzan a medida que el tiempo también sale adelante, y el contexto social y tecnológico mundial va cambiando, según el relato de la doctora Calvin. Así pues, cada caso que nos cuenta se va resolviendo por medio de la lógica, como un juego mental, para averiguar los funcionamientos fallidos de las máquinas, o cómo por medio de la inteligencia y los cálculos se consigue saltar cualquier obstáculo que genere alguna paradoja o contradicción de las tres leyes.
Sin embargo, en el último relato, se menciona, por fin, la cuarta ley (que en las novelas de Asimov es llamada la Ley Cero): «Ningún robot puede dañar a la Humanidad o, por inacción, dejar que esta sufra daño alguno». En efecto, es la ley que Asimov introduce en la novela Robots e Imperio.
Son algo más que leyes: ¡son principios éticos! Cualquiera que las cumpla puede ser un robot… ¡o una buena persona!
Susan Calvin, acerca de las Leyes de la Robótica
Cuentos entrelazados
Por supuesto que los cuentos aquí representados están entrelazados y son una adaptación para este genial volumen que resume de forma brillante el espíritu de Asimov a la hora de dar vida a sus robots y escribir una historia alternativa de la Humanidad a lo largo de décadas, luego siglos y finalmente, milenios. Particularmente, me he echado unas risas con los robots que pillan bailando en las minas, y que no saben a qué se debe tal comportamiento, en lugar de estar trabajando. Os aseguro que el humor no falta en esta obra.
Ni la filosofía. Encarnada en la doctora Calvin, hay un contenido muy fuerte sobre planteamientos acerca de la utilidad de las máquinas, de los robots, de la dualidad ser humano/inteligencia artificial; el progreso, la paz, la violencia…
Luis Bermejo
De nuevo tenemos a otro español que trabajó para Toutain Editor y publicó en Eerie, Creepy y Vampirella, por nombrar algunos trabajos; así como en revistas como Cimoc o Zona 84. Ilustró una adaptación de El Señor de los Anillos en 1979 (auténtica ma-ra-vi-lla) y El Capitán Trueno. Si bien el estilo empleado en esta obra no sobresale especialmente en Firmado por… Yo, Robot, es un dibujo de calidad y completamente aceptable. Con esto me hago una idea de la talla de este ilustrador.
Juanjo Sarto
Guionista y escritor de novelas policíacas, eróticas y de ciencia ficción. Publicó obras con pseudónimo, como la serie Los basureros del espacio (1986), como Néstor Alcón, en Bruguera. Obtuvo altos cargos en Planeta de Agostini. Como veis, esto es solo una mínima parte de lo que podríamos comentar sobre Luis y Juanjo, de esa maleza de buenos artistas de la tinta y la palabra que poblaron nuestras artes hace décadas.
Firmado por… Yo, Robot, Isaac Asimov
Editorial Bruguera, 1983.
Guión: Juanjo Sarto.
Ilustraciones: Luis Bermejo.
Tapa blanda. 64 páginas, B/N.
ISBN: 9788402094629
Tripulación CosmoVersus
- Administro CosmoVersus y colaboro con la Editorial Gaspar & Rimbau, donde he publicado mi primera obra antológica 'Fantasía y terror de una mente equilibrada' y corregido y anotado los libros de los 'Viajes muy extraordinarios de Saturnino Farandoul', entre otras ocurrencias. Mis reseñas van más allá del mero apunte de si este o aquel libro me ha gustado mucho o no. Busco sorprender y animar a los lectores a leer y compartir mi experiencia personal con los libros, igual que los compañeros de CosmoVersus. Soy muy retro, y no por mi edad, pues a los 20 años ya estaba fuera de onda. Perdón por no evolucionar al ritmo de los tiempos, pero es que soy yo.
