Noche de difuntos del 38, de Manuel Martín. La novela que cautivó a los directores españoles Alberto de Toro y Javier Ruiz Caldera, que la han llevado al cine como Malnazidos, estrenada en 2022.
Noche de difuntos del 38
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La primera novela de zombis que llega a mis manos, y a través de Dolmen Editorial, en su Linea Zombi dedicada a nuestros hambrientos y peligrosos amigos. Una figura monstruosa convertida ya en un clásico y que en la última década ha levantado la fiebre literaria en España con títulos atrevidos como el que nos encontramos. La pluma de Manuel Martín ha pulido un fenómeno convertido en película, y por algo habrá sido.
Pasemos a desmenuzar cacho a cacho esta novela, llevada al cine como Malnazidos (Netflix, 2022). La noche de difuntos de 1938 se tiñó de sangre y vísceras, lejos de balas y cañonazos, y quizá la Historia nos lo ha ocultado…
Sinopsis
Es el 31 de octubre de 1938. En plena Batalla del Ebro, durante la Guerra Civil Española, el teniente de requetés Jan Lozano, junto con el soldado Miguel, cae prisionero de un grupo de republicanos, pero cuando todos contemplan un hecho imprevisible y casi imposible de creer, deciden sobrevivir a toda costa. Y tendrán que hacerlo de la peor manera: dejando atrás sus objetivos militares y unidos. Una plaga de muertos vivientes invade el valle y deja casi sin escapatoria al grupo, que se enfrentará a los ataques más viscerales y a un terrible secreto más allá de todo horror humano.
Qué nos encontramos
Es muy sencillo, y el autor lo confiesa en su postfacio: buscaba escribir algo para que lean los demás, no para él. Con aroma al cine brutal y gore de los 80. Y ha conseguido un libro que se lee casi del tirón, al mismo ritmo en el que ocurren los acontecimientos, sin dejar un momento de respiro a los lectores. Cercana a la experiencia de ver una película —algo que ha terminado haciéndose realidad—, Noche de difuntos del 38 resulta un ejercicio ligero, sin recursos literarios, limpio de cualquier adorno, sin detenerse en este o aquel detalle.
Algo que me ha sorprendido para bien a pesar de mis gustos, que ya conocéis en general. Y puedo citar muchísimas razones para darme por satisfecho ante este espectáculo narrativo: Manuel Martín sabe escribir. Hago siempre hincapié en esto, seré todo lo pesado que queráis. Pero algo que está bien escrito siempre se salva, a primera vista. Hoy en día es difícil encontrar autores noveles —ahora Manuel ya no es tan novel—, aficionados…, que sepan escribir una frase correctamente. Y esto es algo digno de mencionar.
Pero al aumentar la presencia de aquellos cuerpos descoordinados, creció también el rumor de sus gemidos. Era un sonido sordo, constante, un lamento que se te metía en el cerebro y te aturdía, como le pasaba a Jan, que le costaba concentrarse en sus propios pensamientos.
Noche de difuntos del 38. Manuel Martín.
Desarrollando la trama y los personajes
Algo que he echado de menos es la profundidad de los personajes, que no están tan trabajados como suelo esperar en la mayoría de lecturas. Pero esto no importa porque el objetivo de la novela es otro, y queda muy claro cuando, desde el comienzo, Martín ofrece en gran densidad la descripción y el contexto de la época y el momento en el que vamos a internarnos, y sin necesidad de enrollarse, del modo más escueto y conciso. O sea, que de entre todas las formas de presentar un relato, no siempre tenemos que escoger “lo de siempre”. Existen muchas formas de literatura, y no en vano, Noche de difuntos del 38 pasa a ser una narración, como he dicho, ligera, impactante, con grandes dosis de acción.
Los cambios de escenario son la excusa perfecta para valorar aún más el libro. Llevamos décadas y décadas viendo películas de zombis que transcurren en el mismo lugar en toda o gran parte de la historia; y no solo en el subgénero zombi. Aquí no pasa eso. El continuo periplo a través de las montañas catalanas y diversos lugares nos deja la sensación de estar avanzando en una pesadilla interminable.
El dedo en la llaga
Y por fin un relato con el alto el fuego que esperaba desde hace mucho. Si creéis que el enfrentamiento entre nacionales y republicanos tiene que acabar en los discursos maniqueos de siempre, estáis muy equivocados. Manuel Martín se aleja de todo eso y refleja a todos por igual. Sin entrar en engaños históricos, borrando todo sesgo personal o prejuicio. Aquí, en la guerra contra los zombis —y fuera de ella, en la guerra contra nosotros mismos—, no hay color, ni rojo ni azul, que valga.
De este modo se cumple uno de los objetivos, así lo veo yo, de la historia: la interminable contradicción del ser humano. Poco a poco, los personajes de los dos bandos irán reconciliándose, no sin sufrir antes pequeños encontronazos. Hay que tener en cuenta que nos hallamos en una guerra, y los clichés y prejuicios de uno y otro bando hacia el otro son inevitables.
Uno a uno se acercaron, con las manos protegiendo sus olfatos, a los pies de Rafir, para verificar la ausencia de mordiscos.
Noche de difuntos del 38. Manuel Martín.
—Joder, seguro que no le mordieron por el olor —apuntó el Mecha, apartándose tras la revisión.
Lección de Historia y de humor
En realidad, no soy un experto en la Guerra Civil Española, y no sé qué carga histórica hay, pero si Martín entiende de Historia, se lo compro. Además, se nota de sobra que el autor sabe de lo que habla. No hay más que fijarse en el lenguaje militar empleado, vocabulario, el contexto geográfico e histórico y las fechas en que se basa la novela.
Otra característica de la novela es su fino humor. Digo fino porque, aunque no es para troncharte, siempre te saca una sonrisa. Decididamente un humor realista, tal como son los personajes y sus reacciones. Aquí, aunque sean personas acostumbradas a la guerra y a sobrevivir en las trincheras, también tienen miedo a lo desconocido, y al principio no todos los personajes se lo toman igual. Al final, una vez acostumbrados a los muertos, harán lo posible por salir vivos de esta. Y lo hacen con valor y humor. Algo de agradecer, puesto que no fuerza chistes ni recurre a la risa fácil. Extrae, de las propias situaciones, la mejor manera de reírse de todo.
Valoración final
Si tengo que elegir una historia de zombis original, esta sería la primera, porque no hay otra igual. La razón: el escenario y contexto histórico. Sí, hay zombis nazis por ahí corriendo, solo que en la época actual. Pero no en el tiempo mismo donde ocurren los acontecimientos, como en este caso, dedicado a uno de nuestros peores episodios históricos.
Así con todo, Noche de difuntos del 38 cae simpática, apetece recordar pasajes memorables, como el encuentro con el aviador italiano, los primeros muertos vivientes, y los diálogos enfrentados entre el grupo de protagonistas.
Personalmente, creo que el tema del motivo del “alzamiento” de los muertos se ha desarrollado poco, me habría gustado que profundizara más, pasa todo muy rápido. De igual forma, la novela no carece de interés y posee una estructura narrativa sólida, muy cinematográfica.
Una amalgama de uniformes de soldados republicanos y nacionales; de falangistas, milicianos, moros y alemanes. Todos ellos, unidos en la muerte (…)
Noche de difuntos del 38. Manuel Martín.
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Nota de prensa sobre el autor
Manuel Martín, nacido lobo (Lubián, Zamora, 1973), creció en la periferia de Barcelona rodeado de cómics y de libros de fantasía y ciencia ficción. Aunque no se prodiga en redes sociales podéis charlar con él en su Twitter @ManuelMartinF. Allá por 2011 combinó su afición a la historia con su gusto por las películas de John Carpenter para escribir una novela de aventuras en la que dos bandos irreconciliables hallaban puntos en común para combatir a un enemigo sobrenatural.
Ni en sus más fantasiosos sueños habría imaginado a sus personajes materializados en una pantalla de cine y, mucho menos, en la jornada inaugural del Festival de Sitges (Extraído de la solapa de Malnazidos).
Manuel acaba de lanzar una nueva novela, titulada El gran detective Byron Mitchell (editorial Harper Collins).
Noche de difuntos del 38, de Manuel Martín. 2012.
Dolmen Editorial. Linea Zombi.
Rústica con solapas. 240 páginas.
Edición 2022 con nueva portada con motivo del estreno de la película Malnazidos, basada en el libro, y postfacio del autor.
ISBN: 9788415296188
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Tripulación CosmoVersus
- Administro CosmoVersus y colaboro con la Editorial Gaspar & Rimbau, donde he publicado mi primera obra antológica 'Fantasía y terror de una mente equilibrada' y corregido y anotado los libros de los 'Viajes muy extraordinarios de Saturnino Farandoul', entre otras ocurrencias. Mis reseñas van más allá del mero apunte de si este o aquel libro me ha gustado mucho o no. Busco sorprender y animar a los lectores a leer y compartir mi experiencia personal con los libros, igual que los compañeros de CosmoVersus. Soy muy retro, y no por mi edad, pues a los 20 años ya estaba fuera de onda. Perdón por no evolucionar al ritmo de los tiempos, pero es que soy yo.
